Écija – El Portal Temático Cultural

REFLEXIONES PERSONALES Y DATOS HISTÓRICOS SOBRE EL CELIBATO DE LOS CURAS por Francisco J. Fernández-Pro

REFLEXIONES PERSONALES Y DATOS HISTÓRICOS SOBRE EL CELIBATO DE LOS CURAS por Francisco J. Fernández-Pro
septiembre 22
02:54 2013
Francisco J. Fernández-Pro

Francisco J. Fernández-Pro

El Papa Francisco la está liando… ¡y ya era hora!

Sin embargo y, confieso que ante mi sorpresa, alguien me comentó ayer que este Papa se está pasando… y esa reacción, incomprensible para mí, me obliga a pensar en voz alta (y eso siempre se traduce en unas letras…).

Tengo para mí que la Iglesia es la Institución más importante del Mundo, pero que Cristo la quiso viva para que anduviera con los necesitados (con las necesidades de la Sociedad, con los tiempos, con las circunstancias,…) y, al final, se hizo tan poderosa que, durante siglos, en vez de caminar con las necesidades del Mundo, obligó al Mundo a caminar al paso de sus intereses… y, por eso, hemos derivado en lo que, por desgracia, durante los últimos años estamos viviendo. El Papa Francisco lo sabe y ha empezado a poner remedio.

Desde que los Evangelios pudieron traducirse a la lengua común para que cualquier hijo de vecino pudiera leerlos e intentar comprenderlos, han sido muchas las preguntas que se han hecho –que podemos hacernos-, sobre la actitud y las normas eclesiásticas, y que son de difícil respuesta, una vez conocida la historia y las Escrituras. Por ejemplo, hace muy poco tiempo leí una Declaración de Juan Pablo II, realizada durante el mes de julio de 1993, en la que dijo: “El celibato no es esencial para el sacerdocio; no es una ley promulgada por Jesucristo” (¡toma ya!).

Al día siguiente, que comía con un sacerdote y un par de seminaristas, les pregunté de sopetón: “¿Por qué no se casan los curas?”. Creo que mi imprudencia les cortó la digestión. Pero necesito saber y, por eso, me pregunto y reflexiono; y, para hacerlo, parto de una premisa fundamental y de dos argumentos básicos.

La premisa fundamental es que el sacerdote es un ser humano completo (con todos los elementos psicosomáticos que posibilitan su desarrollo biológico, fisiológico y psicológico) y, por tanto, renunciar a cualquiera de estos elementos de la personalidad, es una forma de alterar voluntaria -e innecesariamente- todo su proceso psicosomático, arriesgándose a padecer, no sólo trastornos físicos, sino también conductales.

En cuanto a los dos argumentos básicos que considero, el primero atañe a sus competencias directamente, y es que si una de las misiones fundamentales de un sacerdote es la dirección espiritual de personas solteras y casadas, por pura lógica debe exigírsele el conocimiento real de los problemas y las circunstancias, a los que estas personas pueden estar expuestas en su vida cotidiana (¿hasta qué punto puede un célibe aconsejar debidamente sobre los problemas que se pueden padecer en una casa con cinco hijos?).

En cuanto al segundo de los argumentos, es de orden filosófico: si creemos, realmente, que el celibato es un don vocacional del Espíritu (exactamente igual que lo es la vocación matrimonial o cualquier otra), hemos de concluir que no puede se obligatorio, ya que todos los dones del Espíritu son voluntarios y, por ende, no se le puede exigir a nadie, ni puede resultar excluyente la aceptación o renuncia de cualquiera de ellos, para ejercer un magisterio tan importante como el sacerdotal (que tiene mucha más trascendencia que el propio celibato).

Más si todo esto no bastara, me sustraigo de la teoría y me remito a los datos históricos de la propia Iglesia, para que cada cual saque sus propias conclusiones:

1.- En los Evangelios no se habla del celibato sacerdotal.

2.- Los apóstoles en su mayoría –y, por supuesto, Pedro- eran hombres casados. En el Nuevo Testamento se hace referencia a que, en la Iglesia primitiva, las mujeres podían presidir la comida eucarística.

3.- En el año 306 se celebra el Concilio de Elvira. En su Decreto 43, se establece que un sacerdote que duerma con su esposa la noche antes de decir misa, perderá su trabajo.

4.- En el año 325 se celebran los Concilios de Nicea y de Laodicea. En el primero, se decreta que, una vez ordenados, los sacerdotes no pueden casarse; en el segundo, se establece que las mujeres no pueden ser ordenadas (por tanto, antes sí se ordenaban…)

5.- En el año 385, el Papa Siricio abandona a su esposa para acceder al papado. Se decreta que los sacerdotes ya no pueden dormir con sus esposas.

6.- En el año 580, el Papa Pelagio II, decide no actuar contra los sacerdotes casados, siempre y cuando que todos sus bienes eclesiásticos sean heredados por la Iglesia y no por su mujer o sus hijos (¡¡¡ ¡!!).

7.- En el año 836, en el Concilio de Aix-la-Chapelle, se reconoce que en muchos conventos y monasterios, se han realizado abortos e infanticidios para encubrir las actividades de clérigos que no se acostumbran a practicar el celibato. Visto esto, el obispo San Ulrico, propone que, basándose en el sentido común y la Escritura, la única manera de purificar la Iglesia de los excesos del celibato, es permitir a los sacerdotes que se casen (¿nos suena?…)

8.- En el año 1045, el Papa Bonifacio IX se dispensa a sí mismo del celibato y renuncia al papado, para poder casarse (¡¡¡!!!)

9.- En pleno siglo XIV, el Obispo Pelagio se queja de que las mujeres son aún ordenadas y administran confesiones (¡¡!!)

10.- Según censo del siglo XV, la mitad de lo sacerdotes están casados y como tal, son aceptados por la gente.

11.- En 1869, el Concilio Vaticano I, establece la infalibilidad del Papa (hasta,  entonces, se podía haber equivocado todo lo que quisiera…)

12.- En 1930, el Papa Pio XI (ya infalible), decreta que el sexo puede ser bueno y santo.

13.- En 1962, el Concilio Vaticano II, establece que el matrimonio es equivalente a la virginidad (cosa que apoya el segundo de los argumentos básicos expuestos por este servidor sobre la calidad de los dones del Espíritu)

14.- En 1980, en Estados Unidos, se realizan ordenaciones, como sacerdotes católicos, de pastores anglicanos y episcopales casados (en 1994, también se hará en Canadá e Inglaterra)

Otros datos históricos que pueden ser interesantes para un análisis detenido, a fin de comprender la curiosa evolución de un asunto como este, a lo largo de la Historia y en el mismo seno de la Iglesia, son los siguientes:

Hubo 7 papas casados. El último fue Félix V (1439-1449)

Hubo 11 papas que fueron hijos de otros papas, obispos o sacerdotes. El último, Juan XV (989-996)

Después del Concilio de Letrán II -que fue el que, en el siglo XII, estableció como norma definitiva el celibato eclesiástico- hubo 6 papas que tuvieron hijos ilegítimos. El último, Gregorio XIII (1572-1585)

Valgan todos estos datos, para una reflexión seria que, como católico seglar y, viendo los tiempos que corren, me parece necesaria.

facebooktwittergoogle_plusredditpinterestlinkedinmailby feather

About Author

Información

Información

0 Comentarios

No hay comentarios todavía.

Lo siento no hay comentarios todavía, pero puedes ser el primero en comentar este artículo.

Escribe un comentario

Escribe un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.
Los campos marcados son obligatorios *