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Foto: Edición digital de El País. Fijaos cómo el único futbolista blanco que aparece en ella es Griezmann. Detalle interesante

Francia, campeona por segunda vez en la historia, veinte años después de aquella victoria de la mano de Zidane en el Mundial que se disputó en su país. La verdad es que sin Holanda e Italia, no clasificadas, y eliminadas Alemania, Argentina, España, las favoritas en 1/4 parecían efectivamente Francia y sobre todo Brasil. Pero a Brasil la eliminó Bélgica, la otra gran revelación del torneo junto a la finalista de hoy, Croacia, y en un campeonato donde la mayoría de los pronósticos se han ido rompiendo, Francia ha hecho bueno el que hoy la daba por favorita.

En líneas generales, ha tenido más oficio, más regularidad que Croacia, pese a ser un equipo bastante más joven. Y también mucha más pegada, porque los croatas han dominado más y han tenido más ocasiones. Pero esos dos golpes en el primer tramo del segundo tiempo le han dado el triunfo a los bleus. Eso y alguna decisión arbitral muy discutible. El 1-0 no debió subir al marcador. De entrada, la falta a Griezmann es inexistente, y después Pogba está en fuera de juego y participa en la jugada que acaba con el gol de Mandzukic en propia puerta. Pero creo que no obstante el claro error arbitral, Francia es justa ganadora. Un dato: no ha necesitado ninguna prórroga (recordad que en los tres últimos mundiales, las finales se decidieron todas en el tiempo extra). Y eso habla bien de este equipo.

Grande en cualquier caso Croacia y magnífico Modric. Mira que en el Madrid es importante y tiene peso en el juego del equipo… pues creo que en su selección aún más. Designado mejor jugador del torneo con todo merecimiento.

Griezmann, por su parte, ha dominado perfectamente los tiempos en los partidos decisivos, como el de 1/8 contra Argentina o la final de hoy. Ha controlado, ha sabido imprimir el ritmo que en cada momento exigía la situación. Ha madurado y crecido como futbolista. Y por fin gana una final, creo que había perdido todas las que había jugado tanto con su país como con el Atleti.
Y el técnico, muy buen técnico, Didier Deschamps, es el tercero en ganar el mundial habiéndolo ganado también como jugador (los otros dos son el brasileño Mario Zagallo y el alemán Franz Beckenbauer).

Así que lo dicho ayer en honor a la fiesta nacional francesa, vale también hoy.
¡Vive la France!
¡Vive la République!

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